Vivíamos en Atenas
y ese solo hecho nos hacía felices.
(Rex Warner, Pericles el ateniense)
Y cuando el que está impregnado de belleza
encuentra el manantial de lo bello,
oh Sócrates,
y lo hace visible porque tiene
los ojos claros para eso
y lo sabe único en lo múltiple,
a él se une y engendra
virtudes de escala y de vuelo
y por todo esto es feliz
y su felicidad invisible.