23 sept 2025 | By: María García Esperón

La Tierra de la Guitarra


I

 "Por la orilla del mar estruendoso caminaron los aqueos en busca de Aquiles e iban orando al Agitador de la Tierra. Llegaron a las tiendas y naves de los mirmidones y hallaron al hijo de Peleo deleitándose con la lira armoniosa y bellamente labrada, de clavijero de plata, que él mismo había ganado después de destruir la ciudad de Eetión. Con ella se recreaba el alma y cantaba glorias de hombres. Solo frente a él se sentaba Patroclo, esperando a que el Pelida terminara su canto."

(Iliada. Canto IX. Versión María García Esperón)

Con ella se recreaba el alma y cantaba glorias de hombres. Aquiles, el destructor de ciudades, en el descanso de la batalla terrible, con la lira recogía los bordes de su alma y creaba el espacio de identidad y pertenencia y, en las naves de los mirmidones hacía brotar la estabilidad de su tierra, la fértil Ftía, donde aguardaba anhelante el anciano padre.

La lira. Su evolución, la cítara. Y de esta, el claro nombre del instrumento que da identidad y pertenencia al alma colectiva hispánica y a su infinita descendencia americana, que transporta ligera el espacio y la vivencia de la casa española a través del mar Atlántico, las sierras madres de México, las cumbres de los Andes, y las islas antillanas.

Brotan las guitarras y el alma se conforta. Guitarras en los trenes y campamentos de la Revolución Mexicana, en la noche cubana y revolucionaria, en el patio y la protesta argentinos. Guitarra y poesía, porque ella, la guitarra, habla y  tiene palabra:


Urna amorosa de voz femenina,

Caja de música de duelo y placer:

Tiene el acento de un alma divina,

Talle y caderas como una mujer.

Rubén Darío. Nicaragua


 

Empieza el llanto

de la guitarra.

Se rompen las copas

de la madrugada.

(...)

Llora monótona

como llora el agua,

como llora el viento

sobre la nevada

Es imposible

callarla,

Llora por cosas

lejanas.

(Federico García Lorca. España) 


 

...España de la otra guitarra, la desgarrada,

no la humilde, la nuestra,

España de los patios,

España de la piedra piadosa de catedrales y santuarios,

España de la hombría de bien y de la caudalosa amistad,

España del inútil coraje...

(Jorge Luis Borges. Argentina)


 

Cuerdas de mi guitarra

que en dulces ayes

sonando van.

Lloren que cuando lloran

tambien mis ojos

llorando estan.

(...)

Canta guitarra por mí

por mi raza cañí

canta tú.

tú si sabes cantar

tú si sabes llorar por mí.

(Agustín Lara. México)


II


Tierra, Espacio, Lugar de la guitarra: México, El Caribe, Centro y Sudamérica.  Donde han llegado y se han mezclado todas las sangres y todas las cosmogonías, donde la raíz indígena es tan grande y poderosa que todavía no ha podido comprenderse pero a todos sostiene y recibe como la madre oscura y resplandeciente que es, la Madre Tierra.

A esta Tierra, Espacio, Lugar de la guitarra, la evolución histórica le ha dado los nombres de Hispano, Ibero y Latinoamérica. Este último término, producto de la geopolítica del siglo XIX y asociado con el imperialismo de Napoleón III enfrentado al anglosajón de Estados Unidos, hace referencia a la latinidad, esto es, los países que comparten la tradición latina (romana): Francia, Italia, España, Portugal... Latinoamérica es el nombre que se ha impuesto desde el siglo XX a nuestros días, sus connotaciones populares se han alejado de la latinidad y con respecto de la cultura norteamericana dominante el término engloba a la población americana de habla española original que vive en los Estados Unidos y en Canadá. 


III


"En particular, en lo que respecta a la guitarra, no hay intérprete de ninguna nacionalidad hoy en día que no haya incorporado la música con tintes nacionales de los españoles  Francisco Tárrega, Isaac Albéniz, Enrique Granados, Manuel de Falla, Joaquín Turina,  Federico Moreno Tórroba y  Federico Mompou, el venezolano Antonio Lauro, el paraguayo Agustín Barrios y el brasileño Heitor Villa-Lobos, el mexicano Manuel Ponce, los argentinos Astor Piazzolla y Jorge Morel, el cubano Leo Brouwer. La cuestión aquí no es si el espacio de la guitarra es internacionalista y pluralista, sino que es demasiado internacionalista y pluralista..."

Markos Tsetsos sobre el nuevo álbum de Yannis Andronoglou. Pella News

https://www.pellanews.gr/o-markos-tsetsos-gia-to-neo-disko-toy-gianni-andronogloy-153725


Este fragmento de la conferencia que Markos Tsetsos, Profesor de Estética Musical en el Departamento de Estudios Musicales de la Universidad Nacional y Kapodistria de Atenas, impartió a propósito de la presentación del disco Ioannis Andronoglou performs Domeniconi-Dyens-Yilmaz (2023) describe de manera magistral la geografía física y espiritual de este inmenso territorio que se ha llamado Hispanoamérica, Iberoamérica y Latinoamérica y que es, como dice Tsetsos sobre el espacio de la guitarra, internacionalista y pluralista. Internacional y Plural. La palabra griega χώρος además de traducirse como "espacio", posee las connotaciones de "lugar", "sitio". En Grecia antigua la χώρα era el territorio de un país. De modo que el espacio de la guitarra del que habla Markos Tsetsos a propósito del disco de Ioannis Andronoglou es esa entidad que hemos conocido como Hispanoamérica, Iberoamérica y Latinoamérica y a la que ha llegado el momento de, desde la educación y la cultura, renovar el nombre.


IV

Quien esto escribe ha pasado 20 años años visitando colegios de enseñanza básica y media en México, Colombia, Perú, Argentina, Cuba y Ecuador. Mi propuesta literaria se ha basado en mi amor infinito por la cultura griega y desde mi primera publicación, El Disco del Tiempo -sobre la civilización minoica- a la más reciente, Argonautas, no he dejado de constatar en todos los centros educativos que he visitado, principalmente en Colombia, el mismo amor infinito de niños, jóvenes y docentes a la cultura griega. La ilusión, el cariño, la magia con la que abordan los temas que les he propuesto, la fe poética de los niños al sentir en sus vidas la iluminación de la mitología y la filosofía griega es muy difícil de transmitir en palabras pero es una oleada humana de respeto y amor hacia esa tierra, esa historia, esos mitos y leyendas, ese sueño inmortal que es la Helenidad.

Los americanos que logramos llegar a poner el pie en la tierra griega nos sentimos invadidos de amor, de respeto y de agradecimiento. Ella, Grecia, es el origen de nuestros mejores sueños y de nuestras también mejores esperanzas. Sé que hablo en nombre de millones de maravillosos seres humanos, niños, jóvenes, docentes, padres, abuelos, que se sentirían transportados a la más alta dimensión humana al sentirse en plenitud y con derecho, griegos.

Todas estas reflexiones han sido suscitadas en mí por el don que el dios de Delfos -tras cuatro años de luto, cáncer y quimioterapia-  me ha hecho al descubrir, el 7 de agosto de 2025, día de mi 61 cumpleaños, en un periódico griego el Eterno Sueño Helénico de Ioannis Andronoglou.


V

Un símbolo en la cultura griega es un objeto que se parte por la mitad y que se entrega en prenda entre dos personas como una promesa de reencuentro. La sensación de unir lo que ha sido separado provoca en el alma humana las más profundas, estremecedoras y hermosas sensaciones. 

Para Jorge Luis Borges, la experiencia estética es la inminencia de la revelación. Nunca alcanzaremos a leventar el velo del misterio de la existencia, del universo y el ser human o que soy y que eres. Pero sí que podemos estremecernos ante el misterio del símbolo de la guitarra: en su espacio, en su lugar, en su país, en su tierra, dos poderosas, infinitas entidades, Gecia y nuestra América se encuentran, se abrazan y se reconocen en su unidad profunda... para no separarse nunca más.

Hoy, desde Barcelona, puedo decir en alta voz que en los brazos de guitarrista de Ioannis Andronoglou ha despertado el Eterno Sueño Helénico. Han despertado los valores de Libertad, Igualdad, Justicia, Belleza y Verdad. Ha despertado, de una vez y para siempre HELENOAMÉRICA


María García Esperón

Barcelona, 23 de septiembre de 2025


La Tierra de La Guitarra by María García Esperón