De manera poética y misteriosa he recibido el libro Tras las huellas de Aurelio Arturo. Hace diez años de igual y poética, misteriosa manera, descubrí al poeta colombiano, sin saber que la poesía que inundaba mi sensibilidad casi de manera intolerable, era el más grande de los poetas colombianos del siglo XX. Sin estudio previo ni etiquetas, la belleza absoluta de la poesía de Aurelio Arturo vino por mi alma y me encontré aprendiendo de memoria Clima y Morada al Sur, musitando sus versos cada vez que el avión que me llevaba de México estaba a punto de aterrizar en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, o cuando entre nieblas exquisitas como esa poesía visitaba Manizales, aterrizaba en Medellín o cuando vislumbré las altivas cabelleras de la palma de cera. Palmas había, palmas y las brisas...
Es Colombia, poética y misteriosa, la entraña de esa poesía que solo puedo decir que es divina. A diez años, sin olvidarla, ¡no podría!, J. Germán Zarama, intelectual, escritor, periodista, me hace llegar el libro que sobre la vida de Aurelio Arturo ha escrito en conjunto nada más y nada menos que con Gilberto Arturo Lucio, hijo del poeta.
Tras las huellas de Aurelio Arturo es un libro que acude a la fuente de agua clara de la Memoria, para reconstruir la trayectoria de una vida discreta y callada que desde la discreción y el silencio legó una poderosa Palabra. Entrega también la raíz, el tallo y la flor de la historia de Colombia desde 1906 hasta 1974, el alfa y el omega del poeta que nació en La Unión y murió en Bogotá dejando una obra de belleza sobrenatural, alada, liviana y sagrada. Poesía, simplemente Poesía.
Muchas preguntas y líneas de investigación proponen los autores para continuar indagando en la vida y el tiempo de Aurelio Arturo. El dibujo de una lupa nos indica, al final de cada capítulo, que los lectores somos también investigadores y que tal vez más de uno pueda aportar informaciones y testimonios -fotografías, epístolas, recuerdos familiares- que enriquezcan el trabajo emprendido por J. Germán Zarama y Gilberto Arturo Lucio.
Los versos de Aurelio Arturo van guiando el texto y es verdad que también sentimos que no falta nada, que en esa poesía estremecedora está dicho todo lo que necesitamos saber, lo que requerimos sentir y que si acaso, lo que hay que hacer es difundir la buena nueva y acercar a quienes amamos, a quienes educamos y a quienes nos importan a la poesía de Aurelio Arturo. Este libro que va tras sus huellas es la mejor ruta de navegación para adentrarnos en un mar de inagotable belleza. Es tiempo de ir tras las huellas de la Poesía. Tiempo de Aurelio Arturo. Es tiempo de mirar y de morar al Sur.
María García Esperón