6 nov 2025 | By: María García Esperón

Leyendas de las calles de Barcelona: La puerta de los Templarios



 La puerta de los Templarios

(Calle del Timó)

Siglo XIII


En tiempos del rey don Jaime

Primero, el Conquistador,

los templarios conocieron

en Barcelona esplendor.


Tuvieron castillo y plaza,

una iglesia majestuosa

-está ahora dedicada a

la Virgen de la Victoria-.


Los valientes caballeros

que transformaron el mundo

y que estaban iniciados

en las artes de lo oculto,

obtuvieron del rey Jaime

un favor muy apreciado:

que les abriera una puerta

para su propio cuidado.


Así en la misma muralla

de la romana Barcino

se abrió una puerta templaria

que ha resistido los siglos.


Por ella los caballeros

sin decirle nada a nadie

iban en pos de sus sueños

por los campos catalanes.


Cayó el castillo, la estrella

de los templarios menguó,

a ellos que hicieron la guerra,

la guerra los destruyó.


No volvieron a Judea,

ya no buscaron el Grial,

perdieron poder y gloria,

el tiempo los dejó atrás.


Mas su puerta, en Barcelona,

en la calle del Timó,

los recuerda silenciosa…

en el nombre sea de Dios.