24 oct 2025 | By: María García Esperón

Leyendas de las calles de Barcelona: Las puertas de Almería

 


LAS PUERTAS DE ALMERÍA

(Calle y plaza de la Boquería)

Siglo XII


Ramón Berenguer el Cuarto,

para probar su valor,

se alió con el rey Alfonso, 

llamado “el Emperador”.


Lucharon contra Almería 

en la tierra musulmana

y ganaron la ciudad 

los ejércitos de Hispania.


Ramón Berenguer el conde, 

orgulloso de la hazaña, 

le pidió al rey don Alfonso 

que atendiera su demanda.


—Mi señor y mi cuñado, 

en nombre de Berenguela, 

que es mi hermana y es tu esposa 

y también barcelonesa, 

te pido que me concedas 

como mi premio de guerra

el trofeo que yo anhelo, 

para llevarlo a mi tierra.


Y dijo el rey don Alfonso:

—te daré lo que tú quieras, 

Ramón Berenguer, cuñado,

de Almería y de sus riquezas.


—Quiero las puertas del reino, 

de esta taifa que ganamos, 

he de llevarlas conmigo 

mañana mismo, temprano.


—Que son hermosas, es cierto,

y son muy ricas también, 

de madera son y oro 

y recubiertas de piel.


—Quiero ponerlas afuera

 de mi ciudad hacia el mar, 

en la puerta Santa Eulalia, 

que todos puedan mirar.


Ya los asnos y los bueyes 

van tirando de las cuerdas 

de los carros que transportan 

el regalo de las puertas.


Han llegado a Barcelona 

ya las puertas de Almería

acuden todos a verlas  

pues son una maravilla.


Y miran “boc ó badoc”,

que bocar en catalán 

es tener la boca abierta 

por mejor ver y admirar.


Desde entonces hasta hoy 

le dijeron Boquería 

al lugar donde estuvieron

esas puertas de Almería.