Palabras para armar tu canto, de Ramón Iván Suárez Caamal, ganó el IV Premio de Poesía para Niños Ciudad de Orihuela y llega a nuestras manos en una exquisita edición bajo el sello de Kalandraka, con ilustraciones de Cecilia Rébora.
Es emocionante ver en la contraportada de un libro cuya materia poética entrega en buena parte el paisaje y la fauna de México, el español escudo de la ciudad de Orihuela, "su pueblo y el mío", el de Ramón Sijé, el de Miguel Hernández, con quien en las letras, tanto hemos querido, tanto hemos soñado.
Es un libro de encuentro entre las dos orillas del Atlántico que nos escribe en español, que nos renace a Lope de Vega inagotable en este inagotable poeta nacido en Calkini, Campeche y actual señor de Bacalar y su laguna de los siete colores.
Palabras para armar tu canto es testimonio de la cosmicidad poética de Ramón, de la resonancia de sus arquetipos, de la rotundidad jugosa de las frutas de su trópico, de su selva rumorosa, de la luna siempre luna universal y eterna que se mece soñolienta en la hamaca de sus versos.
Arrullos, Enredaletras y Palabras para cantar... otras tantas oportunidades que este libro verde -como el ojalá que menciona el poeta- nos brinda para volver a encontrar el lenguaje sagrado de las fábulas. Sí, tu niñez, ya fábula de fuentes, como dijo Jorge Guillén y citó García Lorca... y estas fuentes confabuladas de la poesía de Ramón nos sumergen en el agua lustral de los bautizos para arrullarnos y enredarnos en un canto constante, en una lluvia tropical y verde que nos convierte en clima o en palabra, en polen o en rocío, en esperanza o en lágrima.
La vida, nuestra vida cotidiana, es muy distinta en las palabras del poeta. Es una vibración continua, un ojo enamorado de lo que ve, un oído embelesado con lo que escucha, un constante canto encantado que entrega lo que lo agita, lo que lo prende, lo que lo exalta y suscita. Así, en el sutil Ovillejo de mi destino leemos:
¿De qué color es la brisa?
De la risa.
¿A qué sabe la certeza?
A tristeza.
¿Quién perfuma mi dolor?
El amor.
Así que viendo el valor
de cada instante que vivo
en estos versos escribo
risa, tristeza y amor.
Las ilustraciones de Cecilia Rébora siguen un hilo lunar y poético que nos seduce de principio a fin (aunque no queremos que el fin llegue en este libro). También nos enreda, como las letras del poeta, en esas líneas gruesas del contorno de sus figuras inocentes y tiernas y también inagotables pues son imágenes que no te cansas de mirar. Cecilia posee un universo creativo que fue al encuentro de los versos de Ramón por los caminos del bosque encantado que hay en el corazón de todo poeta. Y ella lo es, es poeta con colores y con líneas, con destreza y con verdad.
Palabras para armar tu canto es un gran libro de lo que se llama poesía para niños y que en realidad es poesía para todos. Poesía para comprendernos, para soñarnos, para estar solos y acompañarnos, para asomarnos, sí, a la fábula de fuentes de nuestra infancia encantada.
María García Esperón