En la calle de Portaferrissa en Barcelona, una placa da razón de la Cartuja de Escaladei, que se estableció en la Morera de Montsant, en Tarragona. La leyenda narra que el rey Alfonso de Aragón encomendó a dos caballeros el fundar una cartuja en tierras atalanas. En la sierra de Montsant encontraron un pastor que les dijo que en ese lugar se había materializado el sueño de Jacob y que había visto una escalera al cielo por la que bajaban y subían los ángeles. El nombre de Escaladei (Escala Dei, escalera de Dios) se le dio a esta fundación de principios del siglo XII de la que la placa en Portaferrissa da noticia.